Festival POPQUE SÍ

Ayer tuvo lugar en La Tabacalera de Lavapiés (Madrid) la primera edición del festival POPQUE SÍ, de carácter independiente y gratuito, en un horario poco frecuente ya que comenzó a las dos de la tarde (hasta las siete), intentando ser una opción para prolongar la jornada matutina habitual de los domingos de El Rastro de Madrid, a unos pocos metros de allí.

La idea era reunir en este especial recinto (para quien no lo conozca, es un viejo edificio rehabilitado como centro social autogestionado) a varias de las bandas emergentes de la capital, en un intento de recuperar la vitalidad del underground madrileño que en otros tiempos era parte importante en las mañanas del Rastro.

Abrió el programa de conciertos, Luis Brea, del que hablamos hace unos días en Indie-Spain Magazine. Tal vez comenzó demasiado pronto, ya que ni el público (poca gente aún) ni el sonido estaban preparados. Aún así dio buenas dosis de sus letras ácidas.

Con Cosmen Adelaida empezó a crearse ese ambiente de festival que hacía falta. Una banda indie en el sentido más estricto en lo que se refiere a su música, que recuerda a grupos de los 90’s como Sonic Youth o Los Planetas en sus inicios. Un tanto fríos con el público (o al revés) pero dieron un buen concierto en una condiciones que no eran las ideales.

Hoy Muero Viernes pusieron algo de color y ritmos más bailables, siempre dentro de su registro punk-pop. Salieron con muy buena nota y seguramente se ganaron a unos cuantos fans para próximos conciertos.

Cerraron Ornamento y Delito, que confirmaron ser el grupo que más expectación creaban de antemano, ya que cuando les llegó su turno, el patio central de La Tabacalera estaba lleno. Se ganaron a todos los presentes, a los que ya les conocían y a los que no, que seguramente eran muchos. Una pena que el sonido no diera para escuchar bien sus letras, fundamentales en su música. Cerraron proyectando su nuevo videoclip, que prometemos publicar en cuanto esté disponible, ya que se trata de una maravilla creativa con referencias constantes al ‘Séptimo sello‘ deIngmar Bergman.

Conclusiones: Hay muchas cosas que mejorar (tampoco era el objetivo hacer un alarde de organización ni perfección técnica), pero servirá para demostrar que iniciativas así deberían hacerse cada semana (los domingos parecen un día perfecto para ello) y que se debe seguir trabajando desde los estamentos que hagan falta para que esto que hoy escribimos no sea una noticia ni deba ponerse la etiqueta de «festival» y que sea algo más natural, habitual y arraigado en la cultura urbana de Madrid. Grupos de música hay. Faltan lugares para tocar y facilidades para hacerlo. Esto solo es un paso más.

Enrique Molinero