Sr. Chinarro – Presidente

  Hace algunas semanas estuve viendo por tv el programa ‘Nos queda la música’ que conduce tan bien José Luis Casado. Se trataba de un especial de varios capítulos sobre lo mejor de la historia del pop y el rock español. Se notaba que la lista la habían elaborado críticos que saben de qué va esto, por lo bien elegidos que estaban todos y cada uno de los grupos y músicos que ahí iban apareciendo. Lógicamente, el último de los capítulos tuvo espacio para hablar sobre el indie español. Entre una batería de nombres citados a la carrera por el presentador (lógico, harían falta varios programas más para poner los vídeos de todos los grupos indies que han aportado algo significativo al pop y rock español), pusieron los vídeos de tres de ellos: Los Planetas, La Buena Vida y Sr. Chinarro (mucho antes, en un capítulo anterior, también pusieron uno de los Surfin’ Bichos). Lo de Los Planetas es de cajón, no hay nada que comentar. Y de La Buena Vida hay que reconocer, además de lo que significó el sonido Donosti, la influencia que ha tenido en tantos grupos de indie-pop y derivados.

  Más me cuesta ver lo de Sr. Chinarro. Sí, lleva desde el principio ahí, y todavía sigue dando que hablar, así que algo tendrá el agua cuando la bendicen. Pero yo no lo veo. Puestos a elegir un autor de canciones con letras que digan algo me quedo con Fernando Alfaro, Nacho Vegas, Sergio Algora, Xoel, Iván Ferreiro, Nixon… o los más recientes, Ramón Rodriguez (The New Raemon), Joe Crepúsculo o Luis Brea. La lista es larga. Y aunque siempre quedan este tipo de comentarios en la opinión personal de cada uno, tampoco es que haya habido tortas precísamente durante estos días entre los colaboradores de esta web por hablar del nuevo disco de Sr. Chinarro. Sencillamente, no ha calado en ninguno de nosotros.

  ‘Presidente’ no es el mejor disco de Sr. Chinarro, dicho así rápido y suave. Sigue teniendo las letras con ganas de contar cosas que siempre le han acompañado, pero da la sensación que aquí ha querido quitarse los complejos que ha podido arrastrar desde siempre. Las canciones tienen más arreglos que otras veces, y parece que ha querido hacer un disco más ambicioso en ese sentido pero no creo que le vaya bien en ese terreno (‘El cuchillo y el pastel’ es la canción que sale mejor parada, precísamente la más desnuda del disco). Parece ser también que Sr. Chinarro ahora ‘quiere ser feliz’, o tal vez lo sea, no lo sé, aunque se ha pasado media vida renegando de todo lo que tiene a su alrededor: repasando diversas entrevistas suyas, llego a la conclusión de que no le gusta la industria musical, ni la no-industria actual, ni el impacto de internet en la música, ni los blogs y sus blogueros, ni los dj’s, ni el indie del que viene, ni el de ahora… ni el mundo. Incluso en una entrevista me creo que ni siquiera le gusta su disco. No nos engañemos, Antonio Luque no es la alegría de la huerta. Tampoco es que haya que serlo, así que ¿para qué cambiar ahora?

Enrique Molinero

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