We Are Standard – Great State

Cuando We Are Standard anunció este EP, muchos seguramente os esperabais la segunda parte de su disco homónimo, y aunque a primera vista, esto no se ha cumplido a rajatabla, ‘07.45 (Bring Me Back Home)’, el primer corte que abre este EP sigue contando con su sintetizador, su batería, sus guitarras, la misma voz en el micrófono, pero no es lo mismo. Y no es lo mismo porque han introducido a su sonido una frescura inusual provocada por los múltiples cambios que se van sucediendo a lo largo y ancho de este primer corte (incluso repican los ecos de Delorean).

Y mientras las campanas permanecen en el ambiente, las cornetas se alzan para anunciar la llegada de ‘Summer’, obligando a nuestro subconsciente a echar una mirada al pasado para recordar que el calor y los festivales de la época todavía tienen su sitio aunque estemos a estas alturas del año.

Esta brisa de calor se alarga hasta tocarse con ‘Good ones’, en donde la calidez del piano unido a los sonidos empleados hacen que nuestro cuerpo empiece a contonearse como una bailarina detallista con múltiples contoneos de corta duración que forman parte de sus entresijos musicales.

Y sin perder de vista el horizonte, ‘Let’s say I’m in love’ nos transporta a un viaje espacio-temporal en donde todo se llena de color, las palmas el instrumento más importante y nuestra cabeza se llena de recuerdos, pero ese bajo hacia al final hace que tomemos un camino en donde la oscuridad del sintentizador se bate en duelo con la luminosidad del xilófono, y es que en ‘Love me’, por mucho que la batería, los silbidos, la guitarra y el piano quieran posicionarse, el final está escrito y su interior contiene el frío de un suspiro nos devuelve a ese ‘Great State’ del que nunca deberíamos haber salido.